Quedamos con las ganas de estar en la final del Mundial disputado en Chile 2025.
En Santiago la capital de Chile, Colombia no logró mantener el ritmo y una desatención defensiva terminó en el único gol de partido, y que como en 2003, nos deja sin final en el Mundial sub-20.
Desde el inicio dl partido, Colombia tomó la iniciativa. Con Óscar Perea desequilibrante por la banda y Canchimbo como referencia, los dirigidos por Cárdenas buscaron imponerse con presión alta y ataques directos.
A los ocho minutos llegó la primera clara, un cabezazo de Canchimbo que obligó al arquero argentino a una gran intervención. Argentina, paciente, esperó en su campo y comenzó a soltar su fútbol asociativo a partir del minuto 20, equilibrando el trámite.
El primer tiempo se fue sin goles, con dominio repartido y una baja sensible para Colombia: un jugador de la cantera del Junior de Barranquilla, salió en camilla por lesión, alterando la estructura defensiva. Los errores y la fricción empezaron a aparecer en ambos equipos, pero el orden argentino y la intensidad de Colombia mantuvieron el marcador cerrado. Todo quedaba abierto para el complemento.
En la segunda parte, el partido ganó ritmo, encare y tensión. A los 54 minutos, una mala entrega de Romero casi le cuesta el primero a Colombia, y poco después RenterÃa respondió con un potente remate de media distancia que exigió al arquero argentino. El ida y vuelta presagiaba un desenlace agitado. Sin embargo, una distracción defensiva al minuto 73 cambió el rumbo: Arizala se proyectó al ataque y dejó un espacio libre que Silvetti aprovechó para definir con un toque cruzado y poner el 1–0 para Argentina.
Colombia Intentó reaccionar, pero la expulsión de Jhon RenterÃa al minuto 78 complicó cualquier intento de remontada. Argentina, con oficio, manejó los tiempos y desactivó cada intento colombiano. El equipo de Mascherano mostró jerarquÃa y serenidad para cerrar el partido sin sobresaltos.
Con el pitazo final, Argentina selló su paso a la gran final del Mundial Sub-20, quien enfrentará a la sorprendente Marruecos. Colombia, por su parte, deberá reponerse del golpe y prepararse para disputar el tercer puesto. Una derrota que duele, pero que deja aprendizajes y confirma a esta generación como una de las más prometedoras del fútbol juvenil colombiano.
